Estado de ánimo tras sufrir MATRIMONIO DE CONVENIENCIA por una "yiro" argentina. Mientras la JUSTICIA no diga su última palabra, hechos y vivencias son reales, sin indicar nombres de personas involucradas en esta HISTORIA que poco me envía al otro barrio. Real era el constante "empalme" [parado dicen en Argentina] al que estuve sometido: 8-10 horas de sexo al día, incluso cuando doblaba mi jornada de trabajo. Los argentinos, trabajar bien poco, los beneficios "volaban".